martes, 7 de julio de 2015

Día 9 del Camino de Santiago. Medina del Campo - Villalpando (92 km)

Primer día de este camino en solitario en tener compañía, y es que he hecho la etapa de hoy junto a Óscar, bicigrino con el que me crucé en el albergue de Ávila hace dos días y volvimos a coincidir en el albergue de Medina del Campo ayer.

A las 7 hemos empezado a pedalear entre unas cosas y otras ya que hemos tenido que parar a comprar agua en una gasolinera y demás, algo tarde para mi gusto ya que prefiero salir aún de noche para no tener que soportar el calor  infernal que está haciendo.

En general el día de hoy se ha basado en sufrir, sufrir y sufrir, el camino bastante malo y con muchas piedras lo que dificultaba el paso y el ritmo que llevábamos era muy irregular debido a esto, cosa que nos hacía ir más lentos y gastar más energía de las que nos quedaban y es que por lo menos a mi, estas últimas etapas se me están haciendo muy duras.

Hay que decir que el primer tramo no hacía sospechar lo que iba a venir después, subidas, malos caminos, pinos y más pinos y muchas piedras.

La primera parada del día ha sido en Tordesillas, 26 kilómetros después de la salida de Medina del Campo, donde hemos desayunado y hemos continuado la marcha, hasta aquí la verdad que todo muy bien.

Ha sido al pasar este pueblo donde se han empezado a notar las subidas y el mal estado de los caminos.

Mota del Marqués, segunda parada del día, a refrescarnos y a comer algo, 25 kilómetros más! Sólo llevamos 51 kilómetros y mis piernas no pueden más!!

Empiezan los dolores, el calor ya quema y hasta los girasoles le dan la espalda al sol... por algo será!!
Y nada, seguimos pedaleando intentando llegar lo antes posible pero para mi es imposible tirar más, ya no me responden las piernas y es que después de 800 kilómetros en 8 días ya van pidiendo algo de descanso.

Aguantando como he podido he llegado a San Pedro de Latarce donde hemos vuelto a parar para afrontar los últimos kilómetros del día, que sumarían un total de 92.

Este último tramo ha sido el mas complicado, por el camino que era realmente malo y por el calor, y si, se que me quejó mucho del calor, pero deberíais estar aquí, es increíble.

Después de casi morir en el intento, que va es broma! Después de estar hora y media más pedaleando, haciendo un total de seis horas y media hoy encima de la bicicleta hemos llegado a nuestro destino donde hemos comido y una vez hemos acabado, nos hemos dirigido al albergue a descansar.

Siento que las crónicas sean tan cortas y con poca "chichi" pero la cabeza no me da para más, será por el cansancio.

Muchas gracias de nuevo a todos los que me comentáis y me dais ánimo. En parte gracias a vosotros sigo hacia adelante en el camino.

Mañana nos esperan unos 70 kilometros aproximadamente y espero poder hacer la crónica más larga y mejor.

3 comentarios:

  1. Una persona usualmente se convierte en aquello que él cree que es. Si yo sigo diciéndome a mi mismo que no puedo hacer algo, es posible que yo termine siendo incapaz de hacerlo. Por el contrario si yo tengo la creencia que sí puedo hacerlo, con seguridad yo adquiriré la capacidad de realizarlo aunque no la haya tenido al principio.
    La verdadera medida de un hombre, no la da su actitud en momentos de fortuna o bienestar, sino cuando de verdad se enfrenta a las adversidades de la vida.
    Debes tener presente que el camino no es hacerlo todo en unos días y no disfrutar o ir llegando mal sino llegar bien y habiendo disfrutado de ello. Por lo que leo de tu diario, creo que si en algún sitio en vez de un día descansas dos nadie te lo reprochara..Eso faltaba. El contacto con las gentes de los lugares es otra forma de rellenar el espíritu y darte cuenta de la sencillez de las cosas.

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  2. aurelio20650@gmail.com8 de julio de 2015, 11:42

    A Publio Cornelio Scipio, conocido más tarde como Escipión el africano, siendo joven todavía, le sorprendió la invasión de Italia por los ejércitos cartagineses de Aníbal Barca y tuvo su primer encuentro con el mismo en la Batalla del Tesino. Acompañaba entonces a su padre, por entonces cónsul, y se le había asignado el mando de una turma (escuadrón de caballería) en la retaguardia, alejado del peligro.
    Durante la lucha su padre fue herido y Publio, que entonces tenía 18 años, ordenó a sus hombres que le siguiesen para rescatarlo. Viéndolos vacilar, cargó él solo, dando muestras de un gran valor y arrojo y avergonzando a los soldados, que no tuvieron más opción que seguirle.
    Más tarde el padre quiso recompensarlo por su valentía con la corona cívica , pero él la rechazó, aduciendo que la acción en sí ya era una recompensa.
    Sin duda el mayor logro que un ser humano puede obtener es el sabor íntimo de la victoria personal al conseguir un reto que el mismo tiene por importante en su vida.
    Tú Daniel, estás presto a conseguir el tuyo.

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  3. Vamos equipo q ya te queda poco, aunque he de decir q es una lástima porque tienes a medio almacén expectante con tus crónicas diarias, incluida a mi, no me pierdo ni un día pero ya va llegando a su final y aunque me de mucha pena tambien me alegro por ti, porque se que tiene que estar siendo muy duro. Mucho ánimo que tu puedes.

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